Muros de Nalon

Mar y río se congregan en el concejo asturiano de Muros de Nalón, dando lugar a un paisaje muy bonito. Este municipio, dividido en sólo dos parroquias, es el segundo más pequeño del Principado de Asturias.

Aunque pequeño no quiere decir irrelevante. Las villas de San Esteban de Pravia y Muros están llenas de vida y cosas que aprender.

Lugares de interés

San Esteban de Pravia es la villa más destacada de Muros de Nalón. Las grúas de su pasado carbonífero, la arquitectura indiana y los edificios nobles, además de la costa, hacen de ella un lugar muy interesante por conocer.

La villa de Muros tampoco se queda atrás. Destacan la plaza del marqués, el ayuntamiento, la Iglesia de Santa María y el Palacio de Valdecarzana y Vallehermoso.

Playas

Muros de Nalón es mar y costa. A lo largo del litoral se extiende la Senda Costera, que va desde San Esteban hasta la Playa de Aguilar y permite unas panorámicas impresionantes del lugar.

La Playa de Aguilar es la más ocupada de todo el concejo, también la más grande y mejor preparada para el turismo. Se trata de un paisaje rocoso realmente precioso, donde fondean barcos y se puede tomar el sol con tranquilidad. Cuenta con la distinción de Bandera Azul por su calidad.

El resto de playas del concejo son algo más salvajes y recónditas. La playa de Veneiro, la playa de las Llanas, la de San Esteban o la de Cazonera, por ejemplo. Todas ellas joyas naturales.

Fiestas

Muros de Nalón celebra muchas fiestas a lo largo del año, aunque destacaremos las dos más importantes.

Por un lado la Fiesta de San Antonio. Se celebra en junio en el Campo de Palacio con una exposición de maquinaria agrícola, una feria de ganado y una procesión.

Por otro la Fiesta de la Virgen del Carmen. Esta festividad es la más grande de San Esteban de Pravia. Tiene lugar en julio. En ella se lleva a cabo una procesión de la virgen por la ría.

Gastronomía

La gastronomía de Muros de Nalón se basa en los platos marineros. Los pescados y mariscos son las estrellas de sus platos, en muchas ocasiones acompañados por productos de la huerta local.

Al rape se le llama pixín, una palabra que encontrarás en casi todas las cartas y menús. El pixín se cocina de todas las maneras imaginables y es uno de sus platos más destacados. No por menos tiene su propio festival gastronómico, el Festival Gastronómico de Pixín, que se celebra siempre en Semana Santa.

En San Esteban son muy tradicionales también las angulas a la cazuela.

En cuanto a postres, los más típicos van en consonancia con los postres tradicionales asturianos: brazos de gitano, arroz con leche y requesón, entre otros.